Los repelentes son preparados químicos que evitan que los insectos y artrópodos se acerquen al ser humano, reduciendo de esta forma la posibilidad de picaduras.
Tipos de repelentes
La eficacia de cada uno de estos productos varía según la especie de insectos, además de por factores ambientales como la temperatura, la humedad ambiental, la transpiración de la piel, la posibilidad de eliminación por roce … El intervalo de eficacia varía entre 4-8 horas después de la aplicación. En general, independientemente del tipo de producto químico a más altas concentraciones, el repelente proporciona mayor protección y más largo tiempo de acción, aunque diferentes estudios apuntan a que por encima del 50% de concentración, no se produce incremento ni en la duración ni en la eficacia del producto.
En el mercado se pueden encontrar otros repelentes basados en extractos de plantas, aunque de menor eficacia:
Otro factor a tener en cuenta es el de las cremas de protección solar. De forma general se pueden aplicar los repelentes después de la aplicación de la crema solar, esperando un tiempo razonable para que sea absorbida.
Resistencia a los insecticidas
