Gripe aviar

Patógeno: es una enfermedad infecciosa de las aves (en especial de las aves acuáticas salvajes, tales como patos y gansos), causada por virus. La mayoría de los virus de la gripe aviar no infectan al ser humano, pero algunos, como el A(H5N1) o el A(H7N9), causan infecciones humanas graves.

Distribución: Mundial

Mecanismo de transmisión: La mayoría de los casos de infección humana por los virus A(H5N1) y A(H7N9) se han relacionado con el contacto directo o indirecto con aves de corral infectadas, vivas o muertas. No hay pruebas de que la enfermedad pueda transmitirse a las personas a través de los alimentos, siempre que hayan sido bien cocinados.

Clínica: En muchos casos la enfermedad por virus A(H5N1) tiene un curso clínico inusualmente agresivo, con un deterioro rápido y una elevada letalidad. El periodo de incubación de los casos humanos de gripe aviar por A(H5N1) puede ser superior a los 2 o 3 días habituales en la gripe estacional (entre 2 y 8 días, pudiendo llegar hasta los 17 días). Los datos actuales por A(H7N9) indican que el periodo de incubación oscila entre 2 y 8 días, pudiendo llegar hasta los 5 días. Los síntomas iniciales son fiebre alta, generalmente de más de 38°C, y otros síntomas gripales. En algunos pacientes también se han descrito manifestaciones tempranas tales como diarrea, vómitos, dolor abdominal, dolor torácico, y sangrado por la nariz y las encías.Una característica observada en muchos pacientes es la afectación temprana de las vías respiratorias bajas. El distrés respiratorio, la ronquera y los crepitantes inspiratorios son frecuentes. La producción de esputo, a veces sanguinolento, es variable. Las complicaciones de la infección con los virus A(H5N1) y A(H7N9) incluyen hipoxemia, disfunción de múltiples órganos y sobreinfecciones bacterianas y fúngicas.

Diagnóstico: En laboratorios de referencia especializados

Tratamiento: Hay pruebas de que algunos antivíricos, en particular el oseltamivir, pueden reducir la duración de la fase de replicación del virus y mejorar las perspectivas de supervivencia. En los casos sospechosos, el oseltamivir debe prescribirse lo antes posible (de preferencia en las 48 horas siguientes al inicio de los síntomas) para que se puedan obtener los máximos beneficios terapéuticos. Sin embargo, dada la importante mortalidad actual de la infección por virus A(H5N1) y las pruebas de que los virus se replican durante largos periodos en esta enfermedad, también se debe considerar la posibilidad de administrar el fármaco en fases más tardías de la enfermedad. No se recomienda uso de corticoesteroides. En caso de infección grave por virus A(H5N1), el clínico puede considerar necesario aumentar la dosis diaria recomendada y/o la duración del tratamiento. La absorción del fármaco puede estar disminuida en pacientes con infección grave por virus A(H5N1) o con síntomas gastrointestinales graves, posibilidad que hay que tener en cuenta al tratar a estos pacientes. Además, se prevé que la mayoría de los virus A(H5N1) y A(H7N9) serán resistentes a los antivíricos de adamantina, cuyo uso por lo tanto no se recomienda.

Prevención: El control de la enfermedad en los animales es la primera medida para reducir el riesgo para el ser humano.

Epidemiología

Los brotes de gripe aviar en las aves de corral pueden ser motivo de preocupación para la salud pública mundial por su efecto en las propias aves, por la posibilidad de que causen enfermedad humana grave, y por su potencial pandémico.

La aparición de epidemias de gripe aviar hiperpatógena en las aves de corral como el A(H5N1) puede tener graves repercusiones en la economía local y mundial, así como en el comercio internacional.

Clínica

La OMS recomienda que en los estudios de campo y la monitorización de los contactos de los pacientes se cuente con un periodo de incubación de 7 días.