Según una investigación que analizó 400 muestras de comida callejera en Quito, Guayaquil y Cuenca, 8 de cada 10 alimentos que se venden en las calles y mercados de Ecuador estarían contaminados con microorganismos.
El estudio analizó la contaminación en puestos de comida callejera por microorganismos, micotoxinas y metales en productos de consumo masivo de venta ambulante como jugos naturales, encebollado, ceviches, bolones (bollo de masa de plátano verde típico del país), queso fresco, carne molida, pollo, salsas, frutas y ensaladas de frutas.
Las bacterias más peligrosas encontradas fueron Salmonella (en pollos), Listeria (en quesos y frutas) y Vibrio (en pescados y mariscos). Otras bacterias identificadas en el estudio fueron Klebsiella pneumoniae, Campylobacter, Clostridium, Escherichia coli y Bacillus cereus.
Todas estas bacterias están asociadas con enfermedades gastrointestinales, y pueden provocar diarrea, deshidratación y algunas incluso la muerte. Su presencia es una indicación de falta de higiene en la preparación de los alimentos, y más preocupante es Listeria, hallada en quesos y ensaladas de frutas, porque en mujeres embarazadas provoca abortos y en personas con bajas defensas, meningitis.
En cuanto a micotoxinas, en el estudio se hallaron sustancias tóxicas como la ocratoxina y la aflatoxina en granos y harinas de trigo. A largo plazo, estas toxinas pueden ocasionar cáncer o dañar el riñón. Los niveles más altos se registraron en Quito y Cuenca, principales ciudades productoras de este tipo de productos. Guayaquil registra la mayor contaminación por microorganismos patógenos, como bacterias. Esto puede deberse a la temperatura y el clima, ya que es una población costera del Océano Pacífico y la más poblada del país.