Notificada una nueva muerte de un niño de 12 años en Thatta el 25 de junio en el Centro Médico de Postgrado de Jinnah (JPMC) a causa de la rabia. El pequeño fue mordido por un perro hace un mes y no recibió la vacuna antirrábica.
El número de muertes por la enfermedad se eleva a 11 en lo que va de año solo en Karachi (seis niños en el JPMC y otros 5 en el Hospital Indus).
Pakistán tiene una grave escasez de vacuna antirrábica, después de que las compañías indias redujeran su suministro al país, alegando la creciente demanda mundial y la menor producción.
Sin embargo, el número de mordeduras de perros está en aumento en gran parte debido a la oposición de algunas ONG a la eutanasia de estos animales. En lo que va de año 6.000 personas han sido llevadas al JPMC por mordeduras de perros callejeros y recibieron la vacuna antirrábica y la inmunoglobulina en el hospital. El Hospital Indus, en Karachi, ha recibido a más de 7.000 personas con mordeduras de perro que precisaron tratamiento en lo que va de año.
Más de 85.000 personas, la mayoría niños, han sido mordidas por perros callejeros en los primeros cinco meses del año en curso en toda la provincia de Sindh. Una cifra muy superior en comparación con el año 2018 debido al creciente número de perros callejeros en la provincia.
El mayor número de mordeduras por perros callejeros se reportó en la división Larkana, (22.822) Hyderabad (21.099), Nawabshah (12.215) Sukkur (6.000) y Mirpurkhas (6.000). Entre 15.000 y 17.000 personas fueron víctimas de los en los seis distritos de Karachi, aunque la cantidad de casos podría ser mucho mayor, ya que muchas personas acuden a hospitales privados y establecimientos de salud más pequeños que no informan estos casos a las autoridades.
