Un explosivo de poca potencia provocó heridas a al menos 17 personas, la mayoría de ellos turistas, en las afueras de El Cairo, cerca de las pirámides de Guiza (Egipto). El ataque ocurrió a tan solo unos 400 metros del Gran Museo Egipcio, una nueva instalación que todavía no ha sido inaugurada y que albergará la más importante colección de piezas arqueológicas del Antiguo Egipto.
De momento, ningún grupo terrorista ha reivindicado el atentado. Anteriores ataques contra intereses turísticos han sido atribuidos a la filial egipcia del autodenominado Estado Islámico.
En diciembre de 2018 tres turistas vietnamitas y un guía egipcio murieron y al menos otras 10 personas resultaron heridas en otro atentado contra un autocar turístico a menos de cuatro kilómetros de las pirámides. Durante los últimos años, y sobre todo después del golpe de Estado de 2013, Egipto ha padecido el azote del terrorismo
