Autoridades sanitarias británicas alertan de la presencia de la garrapata dura, Hyalomma rufipes por primera vez en Reino Unido.
Este tipo de garrapata dura es capaz de ser portadora y transmitir el virus que provoca la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo.
En septiembre de 2018, un veterinario detectó la garrapata en un caballo del condado de Dorset. El análisis de dio positivo para Rickettsia aeschlimannii, una bacteria que puede causar dolores de cabeza, calambres musculares y ampollas en la piel en humanos.
Entomólogos británicos consideran que la garrapata fue transportada por un ave migratoria, una golondrina, ya que estas emigran desde África durante el verano y suelen anidar en los establos de los caballos. Junto a este hecho, los expertos consideran que el calor experimentado durante el verano de 2018 contribuyó al desarrollo de la garrapata.
Pese a que el riesgo de infección es bajo, este puede representar una amenaza para la salud pública en Reino Unido, siendo el primer caso registrado de la presencia de esta garrapata en el país, capaz de portar una gran cantidad de enfermedades.
El consejo Europeo para el Control de las Parasitosis en los Animales (ESCCAP), insta a los profesionales veterinarios a tomar medidas de precaución ante la posible propagación de esta garrapata en el país.
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