Pintor: Bartolomé Esteban Murillo . (1617-1682). Escuela Española.
Título: “Santo Tomás de Villanueva repartiendo limosna entre los pobres”. 1678. Museo de Bellas Artes, Sevilla.Características: 283 x 188 cm. Óleo sobre lienzo.
Hacia 1665 Murillo recibió el encargo de decorar la Iglesia de los Capuchinos de Sevilla. La realización del trabajo le llevó varios años, al final de los cuales el templo se convirtió prácticamente en un museo. La serie versó sobre la vida de Santo Tomás de Villanueva, fraile agustino, que a pesar de pertenecer a una orden diferente, gozaba de gran popularidad entre la congregación debido a su origen valenciano, ya que varios monjes también eran oriundos de aquella región.
El cuadro, que concluía la serie, fue pintado hacia 1678 y se mostraba al santo practicando la limosna rodeado de mendigos. Santo Tomás aparece representado con mitra y báculo ofreciendo una moneda a un tullido semidesnudo colocado de espaldas hacia el espectador. Bajo un fondo de arquitectura clásica, otros pobres y marginados se disponen alrededor del santo con expresiones graves y en diferentes actitudes.
En este grupo destaca la presencia del niño cuya mirada adusta y severa queda disimulada por las diversas placas alopécicas que se pueden divisar en su cabeza y que coinciden con las típicas tiñas (Figura 1). Estas lesiones son el resultado de la invasión de los pelos por hongos dermatofitos, produciéndose la fragmentación total o parcial de los mismos, y con la consecuente aparición de zonas tonsuradas a nivel del cuero cabelludo.
Se trata de una de las pinturas más excelentes del maestro sevillano, destacable tanto por su estilo compositivo como por su gusto refinado en el tratamiento hacia las figuras. En la iglesia, el lienzo fue ubicado en el cuarto altar del lado de la Epístola y, de toda la serie, fue el cuadro favorito del pintor, el cuál siempre se refería a él como “ mi cuadro ”.
Por el Dr. Alberto Ortiz