Un informe sugiere que la serie reciente de casos de fiebre Q detectados en zonas rurales de Nueva Gales del Sur (cuatro casos en Nyngan) probablemente se deba a la mayor exposición del hombre al ganado infectado en épocas de sequía (como la que ha sufrido el país en 2018).
La fiebre Q es una zoonosis producida por la bacteria Coxiella burnetii, un microorganismo intracelular que es altamente resistente a la sequedad y el calor. Estas bacterias pueden sobrevivir largos períodos de tiempo en el entorno. Los humanos normalmente se infectan al inhalar el microorganismos en aerosol.