Legionelosis es una enfermedad de origen ambiental que se transmite al ser humano a través de aerosoles de agua contaminados con la bacteria Legionella pneumophila. Esta enfermedad aparece con la proliferación y uso de dispositivos y sistemas que utilizan agua templada que favorece el crecimiento de la bacteria y emiten aerosoles durante su funcionamiento. Legionella spp requiere nutrientes obtenidos de organismos comúnmente encontrados dentro del propio sistema de agua, como algas, amebas y otras bacterias.
La relevancia de esta enfermedad de declaración obligatoria, desde el punto de vista de la salud pública, viene dada por su frecuente presentación en forma de brotes, tanto comunitarios como nosocomiales, su letalidad, especialmente en personas de edad avanzada o con enfermedades subyacentes, su impacto en la economía, especialmente, en las comunidades autónomas con turismo y la posibilidad de prevención mediante el control de las instalaciones que utilizan agua.
El último informe sobre los casos de legionelosis notificados en España en la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (RENAVE) se emitió en 2016 (1)
Según el informe, en 2015 se notificaron a la RENAVE con encuesta epidemiológica, un total de 1.310 casos de legionelosis, 380 casos más que los notificados en 2014 (930 casos). En 2015, se rompió la tendencia descendente que se observaba desde 2006.
En 2015 doce Comunidades Autónomas notificaron 23 brotes de legionelosis. Se produjeron un total de 373 casos y 12 defunciones. El tamaño de los brotes osciló entre los 2 casos en 9 brotes, la mayoría asociados a viajes, a 4 casos o más por brote. El brote de mayor magnitud fue el que tuvo lugar en el municipio de Manzanares (Ciudad Real) con 278 casos y cuatro fallecidos.
La mayor parte de los brotes corresponden a viajes y se integran en la Red Europea de Vigilancia de Enfermedades de Legionarios (ELDSNet) (2).
En 2015 fueron 14 brotes asociados a viajes en España en los que enfermaron 47 personas y fallecieron 3 pacientes. La fuente de infección no se identificó en 7 de ellos, en 5 se identificó el sistema de agua sanitaria como origen de la infección y en 2 la instalación de baño con movimiento (spa).
Entre los 9 brotes comunitarios, 2 se dieron en residencias de ancianos, 1 en un polideportivo, 1 en una vivienda particular y 5 en zonas determinadas de distintos municipios. La fuente de infección se identificó en 6 de estos 9 brotes. Fue la instalación de agua sanitaria en tres brotes (vivienda, polideportivo y una residencia de ancianos) y una torre de refrigeración en otros tres brotes.
Tanto la mortalidad como la letalidad aumentaron con la edad para hombres y mujeres. Destaca el elevado número de fallecidos en el grupo de edad de 75 a 84 años en los hombres, mientras que en las mujeres fue en el grupo de 85 y más años de edad.
En 2016 hubo 951 casos, la mayoría son brotes comunitarios y asociados a viajes dentro del país, recogidos en European Centre for Disease Prevention and Control Surveillance (3).
En 2017, se han registrado 109 casos brotes en Cataluña, un 53,5% más que en todo 2016. Dos brotes detectados en Llinars del Vallès y Blanes (La Selva) han dejado cinco fallecidos.
En la Comunidad Valenciana (Chiva, Mislata) en agosto de 2017 fueron siete los casos que se diagnosticaron y uno de los afectados falleció.
Cantabria alcanzó en 2017 el nivel máximo de Legionella con un total de 55 afectados con dos fallecidos, localizado en el Balneario de Liérganes entre agosto y septiembre, detectada en dos piscinas termales del balneario.
En el área de Palmanova en Mallorca, se ha notificado en noviembre de 2017 en ELDSNet, 26 casos con un historial de viaje ha confirmado la existencia de la Legionella en un hotel en el que se alojaban 8 de los afectados.
El objetivo de ELDSNet (2) es detectar, controlar y prevenir casos, clusters y brotes de Legionella en países de la UE / EEE, ayudar con la detección para compartir información y colaborar en acciones de respuesta para proporcionar una mejor protección contra la enfermedad del legionario asociada a los viajes, tanto en el país como en el extranjero.
Dada la importancia de investigar correctamente las causas últimas que producen los brotes de legionelosis, la nueva versión de la Norma UNE 1000030: 2017 «Prevención y control de la proliferación y diseminación de Legionella en instalaciones» ayudará también a mejorar la correcta detección de los focos de infección.
Por la Dra. Mª Concepción Ladrón de Guevara (Hospital La Paz-Carlos III)